Pandemia y fronteras cerradas. Este escenario hizo que LMTerm, especialista en tecnología de tratamiento térmico de São José dos Campos, dejara lo obvio y se reinventara en el montaje de un horno de vacío en Colombia. El equipo llegó en febrero desde Italia a Bogotá y estaba esperando la visita de técnicos de la empresa joseense para entrar en funcionamiento.

“Pensamos que el cierre de las fronteras sería temporal, sin embargo, eso no fue lo que pasó. Teníamos que idear una estrategia para que el cliente pudiera ser atendido”, dijo el director de la empresa, Luciano Micheletto, quien destacó que nunca se había planteado realizar el trabajo, lleno de detalles y altamente técnico, a kilómetros de distancia.

Con las necesidades del cliente, el administrador reunió al equipo y delineó una estrategia para brindar el servicio de ensamblaje del horno de vacío. “Calculamos los riesgos y las dificultades. El cliente contrató un equipo que fue capacitado por LMTerm y, en 30 días, realizamos todo el trabajo, sin fallas”, celebró.

El trabajo le dio a la empresa una nueva mirada a la instalación de equipos remotos. “Antes de la pandemia, era imposible instalarlo de esta manera. Como toda la industria, fuimos extremadamente protectores con las técnicas y cierta información de instalación. La crisis nos hizo mirar con nuevos ojos. Además, ya estamos estudiando nuevas tecnologías para expandir el servicio remoto”.

Según Luciano, la empresa ya está estudiando el uso de herramientas de realidad aumentada para clientes en Chile, Argentina, México y en municipios brasileños fuera del estado de São Paulo. «De esta manera, pudimos incluso reducir el costo de las visitas para el Service Care y el montaje de equipos».

Para el cliente, la experiencia fue positiva. “Estamos muy satisfechos con el soporte de alta calidad proporcionado por LMTerm para el montaje. La empresa nos brindó información técnica clara y confiable. Tuvimos una comunicación activa y directa que facilitó la comprensión de nuestro equipo en el sitio”, dijo el gerente de calidad, Fabián Gómez.

Según Fabián, la inversión en el horno se realizó para reemplazar los actuales procesos de tratamiento térmico. «Buscamos más productividad, altos estándares de calidad y tecnología ecológicamente correcta».

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